Nuestro estilo de vida nos hace pasar mucho tiempo sentados frente a una pantalla. Por ello, Hannspree, fabricante de productos electrónicos de consumo y especialista en pantallas, presenta cinco consejos para aquellos usuarios que desean trabajar de forma más ergonómica, cómoda y funcional con monitores.
Un 95% de los españoles sufre dolor muscular de forma habitual. Es una de las conclusiones principales que se extraen del estudio sobre salud muscular realizado por la Asociación Española de Fisioterapeutas. Para casi la mitad (41%), el motivo de estas molestias se encuentra en pasar largos periodos de tiempo sentado frente al ordenador. Ahí reside la importancia por incorporar rutinas, posturas y adecuación de equipo que minimicen el desgaste corporal. A continuación, cinco consejos de Hannspree para permanecer sentado durante periodos largos frente a la pantalla sin poner en riesgo la salud.
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No encorvarse sobre el ordenador
Estar frente a un ordenador portátil durante decenas de horas a la semana puede provocar distensión de espalda, hombros y cuello. Por tanto, tratar de utilizar un monitor externo o un soporte para el ordenador portátil, a poder ser con teclado y ratón externos, para sostener la pantalla a una altura adecuada. Pensar que, al mirarla, la línea de los ojos debería estar aproximadamente al mismo nivel que la barra de direcciones del navegador web.
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Evitar levantar los hombros
El lugar donde cae el codo debe estar a la misma altura que la superficie de la mesa. Si se tiene que levantar el brazo para alcanzarla, es que los brazos están demasiado bajos. Hay que poder deslizar el brazo sobre la mesa sin levantar el hombro. En este sentido, su ángulo debe ser de aproximadamente 90º y no deben permanecer en suspensión. Es importante que los hombros estén relajados para evitar la tensión y el dolor muscular a causa de una posición forzada.
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Apoyar los pies en el suelo
Formar un ángulo superior a 90º con las piernas y tratar de no doblarlas de manera que se pueda mantener apoyados los pies en todo momento sobre el suelo. Así, lograr una continuidad en la postura general y no forzar la cadera, la cual también debe tener un ángulo de 90º, con los glúteos pegados al respaldo de la silla para lograr una postura alineada y natural. La idea es poder sostener el cuerpo con un mínimo esfuerzo y obtener ventajas biomecánicas para trabajar.
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Seguir la regla 20-20-20
El síndrome visual informático es un trastorno provocado por el sobreesfuerzo que soportamos cuando nos exponemos a las pantallas electrónicas durante mucho tiempo. La regla 20-20-20, ideada por el oftalmólogo Jeffrey Ansehl, dice que debes descansar cada poco tiempo y fijar la vista en otro lugar, de tal manera que pares cada 20 minutos durante 20 segundos y mires a una distancia de 20 pies, que serían unos seis metros. Variando la distancia focal, descansas la vista.
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Cuidado con la luz
La iluminación juega un papel muy importante. Si hay demasiado brillo en la sala, puede acelerarse la fatiga visual o provocar dolores de cabeza; si hay poco brillo, puede resultar extremadamente incómodo leer la pantalla. El balance está en tener menos luz por encima de los ojos y más luz por debajo, ya sea en la mesa o en el propio teclado. Además, conviene evitar sentarse de perfil a una ventana para evitar resplandores o reflejos molestos en la pantalla.
La ergonomía de un monitor es un elemento clave para evitar la adopción de posiciones incorrectas que afectan negativamente a la musculatura. Para cubrir esas necesidades, Hannspree dispone de monitores ergonómicos que ofrecen inclinación hacia arriba y hacia abajo, con giro a derecha e izquierda, ajuste de altura y función pivotable para trabajar en horizontal o vertical. Todo ello con buenos ángulos de visión y tecnología flicker-free para evitar la fatiga ocular.
