Amazfit, una marca global en el segmento de los wearables deportivos, analizó y comparó los hábitos de sueño de personas del Reino Unido, Francia, España, Alemania, Polonia e Italia. El análisis, basado en datos de la aplicación Zepp, reveló tanto diferencias como patrones consistentes, incluida una clara relación entre la hora de acostarse y la duración total del sueño, y en particular la duración del sueño profundo.
“El sueño es un pilar del bienestar, tan importante como la alimentación, el ejercicio y la gestión del estrés. Es esencial tanto para atletas como para aficionados ambiciosos, pero también para cualquiera que haga ejercicio por placer. Sin embargo, lo que importa no es solo la duración del sueño, sino también su regularidad y calidad, lo que incluye el sueño profundo, la rapidez con la que nos dormimos y cuántas veces nos despertamos durante la noche,“ afirma Jesús Carrero, Director General de EMEA en Zepp Health, la compañía detrás de la marca Amazfit.
Incluso los deportistas profesionales reconocen el papel fundamental que desempeña el sueño. “Dormir bien es realmente importante para mi recuperación. Cuando descanso adecuadamente, me siento más concentrada, más paciente y más explosiva en la pista. Lo noto de inmediato: un buen descanso mejora mis movimientos y también me ayuda a mantener la calma durante los puntos largos o en los momentos difíciles. Para mí, dormir es tan esencial como entrenar o la nutrición”, añade Jasmine Paolini, una de las mejores tenistas del mundo, que utiliza los relojes deportivos Amazfit para monitorizar su entrenamiento y recuperación.
La importancia que los deportistas de élite conceden al sueño se refleja en el tiempo que duermen: los datos recopilados por profesionales muestran que descansan considerablemente más que muchos deportistas amateurs.
Patrones y similitudes
La correlación entre la hora de acostarse y la duración del sueño profundo se ve confirmada por el análisis de Amazfit. En los países europeos estudiados, las personas duermen una media de 7 horas y 13 minutos, y el 68,9 % de los adultos experimenta al menos una hora de sueño profundo. Sin embargo, este porcentaje varía en función de la hora de acostarse y la duración total del sueño.
En todos los países estudiados, la relación entre la hora de acostarse y la duración del sueño profundo es constante. En Alemania y Polonia, el 78,8 % y el 77,4 % de los que se acuestan antes de las 10:00 p. m. disfrutan de al menos una hora de sueño profundo, en comparación con solo el 56,8 % y el 54,2 % de los que se acuestan después de medianoche. En el Reino Unido y Francia, los resultados son similares: 79,1 % frente a 56,9 % y 79,8 % frente a 58 %, respectivamente.
También se observan tendencias comparables en el sur de Europa. En España e Italia, el 73,4 % y el 76,8 % de las personas que se acuestan antes de las 10:00 p. m. disfrutan de al menos una hora de sueño profundo, mientras que entre los que se duermen después de medianoche, la proporción se reduce al 57,8 % y al 54,3 %.
¿Qué influye en la clasificación?
La posición en la clasificación puede depender de varios factores, como la ubicación geográfica, las horas de salida y puesta del sol, el clima y, en consecuencia, la hora habitual a la que la gente se acuesta.
Según los datos de la aplicación Zepp, las personas en Francia, el Reino Unido, Alemania y Polonia suelen acostarse antes de las 10:00 p. m., y el porcentaje disminuye gradualmente en franjas horarias más tardías (10:01-11:00 p. m., 11:01 p. m.-12:00 a. m. y después de medianoche). En el sur de Europa, las proporciones son todo lo contrario.
En España, la mayor parte de los adultos (34,2 %) se acuesta después de medianoche; el 28 % entre las 23:01 y la medianoche, el 24,6 % entre las 22:01 y las 23:00, y solo el 13,1 % antes de las 22:00. En Italia, la mayoría de las personas (27,3 %) se acuesta entre las 10:01 y las 11:00 p. m., con otros grupos que muestran solo ligeras diferencias: el 24 % antes de las 10:00 p. m., el 24,8 % entre las 11:01 p. m. y la medianoche, y el 23,8 % después de medianoche.
